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Los experimentos de Raúl López con la sastrería fueron emocionantes esta temporada. Una serie de chaquetas largas a medida con solapas de pico anchas parecían usarse sobre faldas drapeadas en la misma tela, pero en realidad eran todas de una sola pieza, un hecho que solo era obvio cuando los modelos se alejaban y se notaba una espalda elaboradamente drapeada como parte de la presentación de su colección Primavera-Verano 2024.
En el desfile, el creador insinuaba la tensión que López estaba explorando: el deseo de avanzar pero las circunstancias o la tentación humana lo hacían retroceder. Impulsando aún más este punto estaban las camisas con botones que se usaban debajo del traje, que presentaban un cuello extra largo que resaltaba contra el cuello, reflejando el movimiento de ser tirado hacia atrás por el cuello.
Imágenes | Cortesía | IMAXTREE
