Tonos delicados en extravagantes formas se vieron en la pasarela de Danny Reinke durante la semana de la moda de Berlín, en la que las transparencias y la sofisticación de los colores tenues enmarcaron una propuesta dinámica, moderna y conceptual que juega con la percepción de la forma de los básicos de toda la vida.
Tonos polvorosos, rosas agrestes y grises melancólicos se vieron como artífices de prendas que fueron el lienzo para una total renovación de las texturas, en la que imperaron los tejidos de punto y de crochet, así como las referencias de lujo a prendas deportivas vistas en un suéter de cuello profundo con plumas.
Y si de delicadeza y contrastes hablamos, fueron los detalles de tul en las prendas y los estampados geométricos los que llamaron la atención, aludiendo a la delicadeza de las prendas de temporada con la vitalidad de piezas hechas para ser visto.
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