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Como una continuación de su colección anterior, esta propuesta está desarrollada a partir de una perspectiva contemporánea de algunos elementos de la indumentaria tradicional portuguesa, con detalles que se centran en la botonadura mediante nudos, más frecuentes en piezas como la bufanda y los chales con mangas que vemos en el desfile.
Es visible la riqueza de colores (negro, amarillo, rosa, azul), estampados y texturas que, una vez más, realzan la identidad visual que la marca viene presentando como referente de la cultura portuguesa.
Los materiales que componen la colección proceden de la reutilización de restos de colecciones pasadas y otros de material muerto, creando una perfecta combinación de texturas en prendas que le dan un gran giro a la formalidad de la silueta masculina, enmarcada por el desenfado de cortes oversize en abrigos y pantalones anchos.
Imágenes | Cortesía MODA LISBOA
