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Como parte de la fórmula en la que Kim Jones combina los códigos de la herencia de Dior con nuevas expresiones de estilo, para su colección cápsula con el diseñador Eli Russell Linnetz, las excepcionales creaciones para hombre desprenden la energía de Venice Beach y rinden homenaje al diálogo inédito de la modernidad con la historia.
Los códigos icónicos de Dior se reinventan en este extraordinario intercambio entre París y Los Ángeles a través de siluetas enmarcadas por los cortes relajados, las prendas de aires deportivos y destellos metálicos de los accesorios como guiño influenciado por la estética de la cultura del hip-hop.
A lo largo de la colección, imperan tres colores primordiales: el rosa, el azul y los grises, los dos primeros como una referencia a los colores del cielo de California tanto en el ocaso como en el atardecer, mientras que el gris refleja el espíritu modernista de la arquitectura de la ciudad.
Imágenes | Cortesía Dior
