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"El bigote y el rubio son un experimento para una película a la que debería llevar se va en algún tiempo, para habitar el personaje que tengo en mente y ver si puede funcionar. Pero este rubio es complicado de manejar, así que no sé…", dice. Borghi reúne en esta primera frase dos de las características que, talento aparte, le hacen grande: la búsqueda de una profunda adhesión a los personajes y la capacidad de mantener, tras años de éxito y fama, un pragmatismo de chico de la calle que es una pose. "La película será un primer largometraje. Necesito trabajar en un proyecto que está fuera de los sistemas comerciales del cine, aunque últimamente he estado involucrado en muchas cosas buenas”, dice. Borghi proviene de la serie internacional Sky Diavoli tomada de la novela de Guido Maria Brera, en la que recita en inglés, y recientemente ha terminado de rodar algunos episodios de Suburra de Netflix que habían quedado pendientes por la emergencia de los últimos meses: "Ven Todos, hubiera preferido que no hubiera habido una pandemia, pero de las semanas de reclusión salí descansado y reconciliado conmigo mismo. Si tuviera la oportunidad de ponerme en cuarentena dos meses al año, obviamente sin el virus, le pondría mi firma. En una vida vertiginosa al servicio del trabajo y las relaciones públicas, el hecho de haber tenido una justificación para permanecer en casa resultaba liberador. He visto películas y series, he leído con atención libros y guiones, me he formado. Hablé mucho con Irene, mi prometida. Por lo general, se necesitan meses para hablar de todas esas cosas, vivir lejos, no podemos pasar tanto tiempo juntos fácilmente ".
