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Si una cosa sabemos sobre 007, es que siempre atrapa a su hombre. Su objetivo esta vez: Rami Malek, la estrella de 38 años de la larga serie de Amazon Prime Mr. Robot, que dejó sin palabras a la industria del entretenimiento con su actuación extraordinariamente comprometida y extraña como el fallecido líder de Queen, Freddie Mercury, en la película biográfica de 2018. Bohemian Rhapsody. "Incluso antes de Bohemian Rhapsody tenía una muy, muy buena reputación", dice Daniel Craig, veterano de cinco películas de Bond, incluida la próxima No Time to Die, que se estrenará en abril. Junto con los otros poderes de Bond, incluidos los productores de larga data Barbara Broccoli y Michael G Wilson, y el director de No Time to Die, Cary Joji Fukunaga, Craig estaba en la búsqueda de un nuevo villano para asumir en su salida final como el mundo agente secreto de más alto perfil. "Cuando llegó el momento de emitir esta parte, tienes una lista de deseos de personas con las que quieres actuar, y él estaba en la parte superior de la lista", me dice Craig. “Tuvimos suerte. Estaba libre". El propio Malek no estaba exactamente fuera del radar: "Acababa de ganar un Oscar", como señala Craig, y es fácil ver el potencial villano en él. Además de su reputación como actor cautivador, tiene una cara notablemente versátil: cuando baja los párpados, sus grandes ojos azules se ven somnolientos y fríos; si él ahueca sus mejillas, su mandíbula sobresale y sus pómulos se revientan; tiene una voz baja y sonora que puede aplanar a un siniestro monótono. (El combo de pómulos y mandíbula también es útil en otras ocasiones: Malek es actualmente el rostro de la campaña de ropa masculina SS '20 de Saint Laurent). Pero tampoco era, de hecho, libre: estaba filmando la cuarta y última temporada de Mr. Robot en Nueva York. Las fechas se modificaron, luego se volvieron a mezclar, luego se volvieron a mezclar nuevamente, hasta que finalmente se encontraron un par de semanas justo al final del programa de producción de Bond durante el cual Malek podría venir a Pinewood Studios, justo al oeste de Londres, y filmar la mayor parte. de sus escenas "Cuando alguien me dice que algo es una posibilidad, empiezo a pensar: 'hagamos que funcione'".
