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Cada marca en su cuerpo tiene una historia que contar, desde los brazos, la espalda y hasta las piernas. Sin mucha incitación, Kannur Lokesh Rahul enrolla sus jeans desgarrados y desteñidos a la moda para mostrar los tatuajes en su pierna. Hay uno para cada lugar que ha visitado, por ejemplo, una brújula para marcar un viaje a Australia, una herradura de Milán, una daga grabada en Miami... "Hace mucho tiempo que tatué los nombres de mis padres. Se estaban volviendo paranoicos acerca de cuántos tatuajes me estaba haciendo, así que obtuve sus nombres y nunca dijeron nada después de eso", dice, ofreciendo una rara sonrisa. Luego hay otros con significados más profundos, como una mariposa para significar la transformación, y flechas gemelas cerca de su muñeca para decir que la vida puede empujarte hacia atrás, pero disparas hacia donde quieres estar. Hay una flor para nuevos comienzos y una lechuza para la sabiduría, para aprender del pasado y no amargarse. Pasará un año desde el episodio infame en el programa de televisión de Karan Johar, una semana antes de un año, Rahul recuerda precisamente cuando nos encontramos en la víspera de Navidad, y tiene estos tatuajes que le recuerdan lo que fue un punto particularmente bajo en su breve carrera como jugador de cricket internacional. Atrapado en el fuego cruzado de unas pocas declaraciones hechas por su compañero en el programa, el compañero de cricket Hardik Pandya, Rahul se echó la culpa, fue suspendido del equipo indio y se enfrentó a un aluvión de odio de los fanáticos. "Cada vez que hay un evento o algo importante en mi vida, bueno o malo, me gusta recordarlo a través de un tatuaje", dice Rahul, quien recibió tinta por primera vez cuando tenía 16. El fanático de David Beckham agrega: "Cuando nos suspendieron, tuve mucho tiempo".
