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No piensa parar. En diciembre de 2019 estrenó 1917 (Sam Mendes), nominada y premiada en decenas de certámenes. Este año estrenará The True Story of The Kelly Gang, dirigida por Justin Kurzel y (spoiler) está que se sale. No será lo último que haga. George MacKay está hambriento. “Lo más increíble es que de verdad te preguntas si tiene cortes”. “¿Crees que fue una sola toma?”. “No way!”(…). “¿Por qué no nominarían al protagonista para el Oscar?”. “No sé, tío, pero yo sentía que estaba dentro de la pantalla”. Sonrío para mis adentros. Acabo de terminar la entrevista con George MacKay, protagonista de esta película y miembro de la nueva generación de actores británicos (junto a Taron Egerton, Craig Roberts o Michael Ward) más talentosa de los últimos años. La primera vez que le vi en la gran pantalla él tenía diez años y yo nueve. Fue en una versión de Peter Pan en la que interpretaba a Curly, uno de los niños perdidos. Desde entonces hasta hoy, con 27 años, ha participado en una veintena películas. El comienzo no fue fácil: cuando era adolescente lo rechazaron en LAMDA (London Academy of Music & Dramatic Art), una de las instituciones más importantes para la formación de actores (de la que es presidente el doctor-detective-rey más famoso de Reino Unido, Benedict Cumberbatch, por cierto, actor secundario en la película que ahora George protagoniza, 1917. ¡Cómo es la vida!). Años después fue nominado como estrella emergente en los BAFTA (2014) y se alzó con el Trophée Chopard en Cannes (2017).
Realización Álvaro De Juan | Fotografía JUANKR | Texto Alba Díaz
“Encuentro inspiración en mis seres queridos. Amo caminar, creo que me da enfoque y otros puntos de vista. Es como una forma de meditación para mí”
“En vez de cansado, me siento enérgico. Me siento hambriento. Tengo muchas ganas de trabajar”
