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Después de haber permanecido en su tradicionalismo sartorial durante tantos años, incluso cuando muchos abandonaron el traje tradicional, la corbata y la apariencia tono sobre tono a favor de la ropa relajada, Ralph Lauren ha salido al ruedo para la temporada otoño-invierno 2020, marcando el 25 aniversario de Purple Label con una mirada retrospectiva a sus diseños tradicionalmente diseñados a lo largo de los años. Purple Label fue, desde su inicio, un grito de batalla: hace veinticinco años los hombres todavía usaban trajes, sí, pero se habían vuelto grandes y anchos, con frentes de pliegues y telas agrupadas sobre los zapatos. Purple Label fue un gran acto de nostalgia por un tiempo en que los trajes hicieron al hombre, y fueron diseñados para ajustarse, o al menos ajustarse a la forma en que Ralph quería, con hombros anchos, solapas anchas, cintura contorneada y una longitud más corta. Para marcar el momento, el diseñador ha creado una colección cápsula de algunos de sus looks a medida de los años noventa hechos en tejidos británicos: hay un traje de cuadros escoceses con solapas de pico combinadas con calcetines a cuadros de pata de gallo, un look en raya de tiza con doble botonadura y una línea de looks de noche, chaquetas de esmoquin y abrigos de cola, en lana y terciopelo, algunos inspirados en uniformes militares escoceses.
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