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Presley Gerber no necesita el famoso apellido de su madre, la supermodelo Cindy Crawford para demostrar su pedigrí estelar. El joven de 19 años, que es el mayor de dos hijos, es una imagen viva de Crawford. Un claro ganador de la lotería genética, Gerber toma las características distintivas de su madre: pómulos altos y definidos que se adhieren a una línea de la mandíbula cincelada, una estructura facial alargada y alargada suavizada por sus atractivos ojos marrones con forma de almendra y su distintiva marca de belleza que se encuentra sobre el labio . Por defecto, Gerber marca todos los requisitos de un modelo. Con estas llamativas buenas miradas, siguió la expectativa implícita de que era solo una cuestión de tiempo antes de que se uniera a la alineación de supermodelos de segunda generación que siguen los pasos de sus famosos padres. Estas presunciones, sin embargo, se desviaron de la trayectoria profesional que Gerber inicialmente se propuso forjar para sí mismo. Tenía poca idea sobre el estatus de supermodelo de su madre, y mucho menos, cualquier intención de seguir la misma trayectoria profesional. "Cuando alguien así es tu madre, realmente no te das cuenta porque eso es lo único que realmente has visto, así que nunca entendí que ella era famosa", recuerda Gerber.
