Sebastian Rulli posa como el hombre en portada para ZERO Magazine


El actor argentino afincado en México, Sebastian Rulli se convierte en protagonista de la edición de diciembre de ZERO Magazine, capturado por el lente de Lendl Solís con el estilismo de Ro García.




Cuando tenía 16 o 17 años en la escuela había un taller extraescolar de teatro, la verdad es que yo siempre me había dedicado a hacer deporte en mis tiempos libres y ese año realmente me llamo la atención", recuerda acerca de cómo nació su pasión por interpretar personases y los escenarios.

Nuestro #HombreZero asegura que nadie en su familia se había dedicado ni al arte, ni al entretenimiento, solamente su padre estaba interesado en la pintura pero de manera amateur: "No sé porque me llamó la atención. Acepte y decidí empezar mis clases de teatro y a partir de ahí cambio mi vida".

Esos primeros años en las clases de teatro ayudaron a Sebastián a conocerse mejor y a desatorar muchos nudos e intrigas, sin embargo no lo veía como una carrera sino como un escape, un encuentro consigo mismo, hasta que en algún momento de su vida se dio cuenta que era su pasión.

Fue durante sus primeros años de universidad en su natal Argentina cuando Rulli se dio cuenta que, a pesar de ser un alumno modelo, la carrera que había elegido no lo satisfacía y no veía un futuro en ello, así que decidió irse a vivir a Europa donde tenía oportunidad de incursionar en el modelaje.

"Era una agencia que tenía una escuela de teatro y eso fue lo que me llamó la atención, yo dedicaba mis tiempos libres a estudiar teatro porque me gustaba y así fue. Luego regresé a Argentina y ahí fue donde surgió un casting de televisión que me invitaron de casualidad y me quedé. Ya una vez trabajando, dejé mi carrera de modelo un tiempo y me dediqué a estudiar teatro en la noches, algunos cursos talleres. Traté de ser mejor cada día".

Aunque el éxito comenzaba a llegar a la carrera de Sebastián Rulli, para él era importante dar el siguiente paso lógico, venir a México a probar suerte en la televisión, y le fue tan bien que se quedó a vivir aquí. 



 "Para mí, México es un lugar al que le debo todo, en donde he crecido y me ha dado todo, porque tengo un hijo Mexicano, entonces yo por México doy mi vida."


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