Afeitarse es uno de los rituales masculinos por excelencia que todo hombre debe de saber realizar correctamente, por lo que un saltarse un paso o ejecutarlo de forma incorrecta puede llevar a consecuencias como la irritación en la piel debido a tres factores comunes que puedes evitar.
Para que no tengas que preocuparte de nada más y no alterar tu rutina del día a día, junto con Gillette te ofrecemos estos consejos para que tengas un rostro impecable cada mañana.
Falta de humectación
Utiliza siempre una crema de afeitar. Productos que hidraten tu piel contienen lubricantes
que la protegen, ayudando a que la afeitadora se deslice mejor manteniendo la hidratación durante la afeitada. Cuando el pelo está hidratado, se hincha y
se suaviza, lo que permite que tu afeitadora se deslice de forma más fácil sobre tu rostro. Esto se traduce a menos jalones y tirones, rasguños y por ende menos irritación.
Fuerte presión en la piel
Ser muy agresivo con tu afeitadora es la vía rápida para
el ardor al afeitarte. Usa pasadas ligeras con crema o gel de afeitar para
mantener tu cara libre de irritación. Deja que la afeitadora haga el trabajo y
evita pasadas repetitivas sobre la misma parte del rostro, ya que reducen la lubricación y pueden causar
irritación en una zona específica.
Cartuchos viejos
No sientas ardor a causa de cartuchos malos. Cuando
comiences a sentir incomodidad y veas que las navajas de tu rastrillo dejan de sentirse suaves, cambia tus hojas y tendrás menos irritación en tu
afeitada, así tendrás resultados más fáciles en menos tiempo.
Después de estos consejos, no olvides terminar tu rutina con un producto humectante para cerrar los poros y así mantener una hidratación natural en la piel durante todo el día.
Imágenes | Pexels