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El violinista libanés Ara Malikian posa para la edición Julio/Agosto 2017 de la revista Esquire España con fotografía de Jacobo Medrano en la portada y la sesión fotográfica, capturada en su mayoría a blanco y negro.
· ¿Cuánto hace que no enseño las orejas? Prácticamente, durante toda mi vida. De niño tenía las orejas supergrandes y mis dos hermanas, que eran más mayores que yo y me hacían todo el estilismo, decidieron que tenía que dejarme el pelo largo. Y así se me quedó, hasta hoy.
· Hoy en día soy violinista por amor. Siempre he amado el violín, pero mi padre había decidido por mí que iba a ser violinista. Me obligaba a practicar muchas horas.· Llegué solo a Alemania. Aquella experiencia fue un aprendizaje muy grande. Supe ser independiente y aprendí a seguir adelante, aunque me costó un año, casi dos, conseguirlo. Pero a partir de ahí me sentí mejor.
· Intentaba encajar en el mundillo clásico, pero ya empezaba a ver que no encajaba. Desde que era niño hasta hoy, he escuchado siempre esta frase: “Bach no se toca así”. Algunas personas siguen empeñadas en que ellos saben cómo se toca esa música.
· Tengo un violín de 300 años y otro que pertenecía a mi abuelo. En mayo de 1998, el piso que tenía en Berlín salió ardiendo por un cortocircuito. Perdí todo y lo único que pude rescatar fue el violín de mi abuelo.
