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El sincretismo de un diseño simple es la máxima regla en la colección Resort 2018 de Jil Sander. Una propuesta en la que los esenciales outerwear para el entretiempo se pintan de colores neutros como el gris y el nude, acompañados de prendas de diario como camisas y ligeros suéteres de cuello alto, para combinarse con pantalones recortados hasta el tobillo.
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