Algodón, lana y un toque waterproof son los elementos esenciales con los que Dockers nos conquista este invierno a través de su colección: un viaje a los orígenes de la marca que desde 1870 ha cautivado el estilo de todo hombre con su íconico aire casual que ahora toma como referencia los metales de las construcciones de la Costa Oeste, como el gris del cemento, el negro del acero y la rojiza tonalidad del Golden Gate.
El clásico pantalón Khaki se reinventa con colores sólidos como azules, amarillos y verdes en una versión remasterizada del estilo formal de San Francisco, haciendo cualquier look una oda a la comodidad y protección contra el agua agregándole aún más estilo a nuestro armario este otoño.